DANIEL SALVADOR FOTOGRAFIA

1621
Madera tallada y policromada, 120 x 80 cm Convento de Santa Clara de Sevilla

Esta talla forma parte del grupo escultórico de la Trinidad que ocupa el ático del retablo mayor de la iglesia del convento sevillano de Santa Clara, en el que Cristo es sostenido por Dios Padre en presencia de la paloma del Espíritu Santo, rematando una gran máquina retablística realizada a mayor gloria de la orden franciscana. El modelado del paño de pureza, de extraordinaria calidad en el tratamiento de los pliegues y el nudo y gran plasticidad en la forma de resolver su caída, recuerda a anteriores obras como el Cristo de la Clemencia, aunque difiera en la posición de los pies. La excepcionalidad de ser una talla concebida para formar conjunto con otras representando a La Trinidad y de estar destinada a ubicarse en la mayor altura del retablo, confiere a este crucificado una singularidad en su proporción, más reducida y no partícipe del canon alargado y de pequeña cabeza que Montañés había plasmado con anterioridad en los crucificados exentos. El retablo fue contratado el 6 de septiembre de 1621, y fue policromado en 1623 por el pintor Baltasar Quintero, tras el pleito que enfrentó a Montañés en dicho año con Francisco Pacheco, su colaborador habitual. El tema evoca modelos previos, entre los que pueden citarse la Adoración de la Trinidad de Alberto Durero de 1511 conservada en el Kunsthistorisches Museum de Viena, o La Trinidad, del Greco, en el Museo Nacional del Prado, de Madrid.